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TUS MANERAS DE SER - EL INGREDIENTE SECRETO OLVIDADO PARA CREAR TU REALIDAD

Actualizado: 21 jul 2022

Con este tema pretendo llevarte al profundo y vasto mundo de los juicios y las expectativas que son nada más y nada menos que dos de las principales causas del sufrimiento humano. Si no estuviéramos llenos de juicios y expectativas, nuestra vida estaría llena de paz, tranquilidad, compasión, aceptación, gratitud y dicha. Desde pequeños nos enseñaron que hay cosas que están bien y cosas que están mal. Hay cosas agradables y cosas desagradables. Cosas buenas y cosas malas. Nos dan una ruta de cómo nosotros, las cosas, las situaciones y los demás deberían ser, y si no es así, aparece la preocupación, la frustración, el agobio, el estrés, malestar, tristeza, depresión etc. Pero bueno… los juicios y expectativas son también parte importante del aprendizaje de una experiencia humana, y esa es la que vinimos a vivir a la tercera dimensión para poder experimentar, integrar y evolucionar.


Entonces… maneras de ser.





Como te decía, aprendimos que hay maneras de ser positivas y negativas. Que ser generoso, amable, responsable, respetuoso, humilde, noble, bondadoso, fiel, leal, enfocado, disciplinado, responsable, alegre etc, está bien. Y que si eres una persona así ¡Hurra! Vas por buen camino. Por otro lado, la deshonestidad, la indisciplina, la sumisión, el control, la tristeza, la irresponsabilidad, el egoísmo, la arrogancia, la pereza etc, están mal, y que si eres alguna de estas "horribles cosas"… mmm ¿ni que decir verdad?


Ahora vamos a comenzar a poner a prueba tus juicios, vamos a iniciar un proceso de autoconocimiento, vamos a confrontar nuestros valores y principios. Entendamos que las maneras de ser no son estáticas, que éstas no son una característica inmutable del ser que desarrollamos o aprendimos, ni mucho menos que nacimos así, siendo parte de nuestra personalidad que nadie nos quitará. Entendamos también que las maneras de ser no son ni buenas ni malas, debes analizar el resultado al que te llevan, qué es lo que creas con cada una de ellas, y ahí sí concluir qué maneras de ser te funcionan y qué maneras no te funcionan. Incluso, una misma manera de ser te puede funcionar para un escenario de la vida y no funcionarte en otro.


Te pongo un ejemplo: ser arrogante en una reunión de negocios, dándote tu lugar, presentando con orgullo el gran producto que tienes y cómo éste tiene muchas más ventajas que el de la competencia; mostrarte como experto en lo que haces, estando seguro de ti mismo, puede llevarte a ganar un contrato que anhelabas para tu empresa. Si esa misma arrogancia la usas después en una discusión con tu pareja, el resultado puede ser una gran pelea, un divorcio, dormir en camas diferentes durante una semana o algo así, ¿me vas siguiendo?...


Ser irresponsable puede darte un resultado que no quieres en tu trabajo, pero si con el paso del tiempo te das cuenta que, el no ser responsable te ha permitido conocer muchas personas importantes para ti debido a que cambias de trabajo constantemente, te ha permitido conocer de muchas industrias y no aburrirte haciendo siempre lo mismo, te ha permitido viajar y perder el miedo al desempleo, ¿podrías decir entonces que ser irresponsable fue malo? Ahora, tampoco es que sea bueno, porque si el resultado que anhelas es hacer una carrera administrativa en una empresa y llegar algún día a ser el gerente, o lo que quieres es hacer crecer tu propio negocio, es posible que aquí la irresponsabilidad ya no te lleve al resultado que quieres. A lo que voy es, la manera de ser en sí misma no es la que está bien o mal. Se trata de que aprendas a conocerte y a analizar en qué momento la usas, cómo la usas y qué logras crear con ella. Cuando usamos las maneras de ser voluntariamente, conscientemente, sabiendo lo que queremos crear, ellas dejan de usarnos a nosotros. El resultado es que retomamos el control de nuestra vida y podemos crear lo que deseamos, en lugar de manifestar las circunstancias por defecto.


Hace pocos días hablaba con una amiga que me contaba cómo, gracias a su controladora evitó que un amigo perdiera millones en una estafa que le intentaban hacer, y no sólo esto, el amigo estuvo tan agradecido con ella que le perdonó una deuda de 4 millones de pesos que ella tenía con él. Ella me decía: "Maria en ningún momento lo hice pensando en eso, le insistí y hasta peleé con él porque no me hacía a la idea de que fuera a entregarle el dinero a los estafadores". Allí reafirmó cómo, una manera de ser con la que se ha peleado tanto, no es tan mala como ella cree. A veces, el control funciona, y de hecho a veces es necesario. Ella creó con su controladora, abundancia para ella y para su amigo, y fortaleció los lazos con él.


De esta manera, lo más importante que debes saber sobre las maneras de ser, es que todas tienen su polo opuesto. Por ejemplo: arrogante tiene un polo opuesto que es humilde. El principio de polaridad que es uno de los siete principios universales de la creación, nos dice que el equilibrio es el mejor lugar para estar. EL CENTRO, no nos dice que el lado bueno (humildad) es en donde debemos estar, nos dice que es en el PUNTO MEDIO. Arrogancia y humildad, según este principio son de la misma naturaleza pero diferente intensidad o grado. Así como calor y frío, alto y bajo, son de la misma naturaleza pero diferente grado. ¿Dónde comienza el frío y dónde termina el calor? Eso es cuestión de percepciones, de juicios, de cómo vemos la vida. Para algunos el frío es aguantable y agradable hasta los 15 grados, para los canadienses será tal vez hasta los 10 grados bajo cero. ¿Quién tiene razón? TODOS, porque todos responderemos y percibiremos según las experiencias vividas y la programación subconsciente.


Entonces cuando te encuentres juzgando: "esa persona es muy irresponsable", pregúntate, ¿En comparación con quién, o según quién?, ¿Opinará él lo mismo?, ¿Opinará todo el mundo lo mismo? ¿No seré yo también irresponsable en algunas oportunidades? ¿Quién dice que cuando tú eres irresponsable es menos grave que cuando esa otra persona es irresponsable?


Acá también entran nuestros juicios porque creemos que ser irresponsables con nuestro cuerpo no cuenta por ejemplo. Entonces decimos: "mi compañero de trabajo es muy irresponsable porque nunca entrega los informes a tiempo". Pero si te miras a ti, tal vez fumas, tal vez tomas licor todos los fines de semana, comes muchas grasas y no haces ejercicio, pero no consideras eso una irresponsabilidad hacia ti y hacia la vida. Tal vez la irresponsabilidad de tu compañero nunca genere perjuicios reales y graves a la empresa, pero tal vez tú si te enfermes o te sientas muy mal con tu cuerpo algún día por la irresponsabilidad para con este. Todo esto te lo digo porque el juicio hacia nosotros y hacia los demás está presente todos los días, y hasta que no nos demos cuenta de que todo es cuestión de percepción y que nadie es mejor que nadie, y que tú también habitas maneras de ser que te llevan a resultados indeseables, no haremos consciencia de este hecho.


¿Qué hacer entonces con las maneras de ser? Piensa en las maneras de ser como prendas de vestir. Un día te pones negro, otro día rojo, otro blanco; un día luces elegante, otro casual y otro desaliñado. Con las maneras de ser es así. Un día habitas la irresponsabilidad, la alegría, la espontaneidad, la autenticidad, y al otro día habitas la disciplina, el enfoque, el control, el egoísmo, la pasión, el entusiasmo y la arrogancia. Y el juego está en que veas qué puedes crear con quien elijas ser, porque además este es el primer paso, ser consciente de quién estás siendo, y quién quieres ser; y cada que tengas un resultado frente a ti, evalúa las maneras de ser que estuvieron presentes para crear eso. Si ese resultado es: me robaron, mi novia me dio un regalo, o mi mamá me dijo que me amaba, o un amigo me traicionó, o me echaron del trabajo, o me gané un bono de medio salario gracias a un informe que entregué, todo esto son creaciones tuyas. Si estás en posición responsable y no en posición víctima, sabes que todo lo que haga parte de tu realidad fue creado por ti. Entonces ¿Cómo creaste eso, quién fuiste?. Y es importante que lo pienses y que lo escribas tanto si te gusta como si no te gusta ese resultado para que aprendas a conocerte y para que descubras qué puedes crear, cuáles son tus potenciales, cuáles maneras de ser te funcionan y cuáles no.


Tal vez en este momento pienses: "a mi no me hace mucho sentido esto porque yo de verdad considero que soy una persona muy responsable, yo no me considero para nada irresponsable". Ó, yo quisiera ser divertido pero de verdad que soy cero divertido, esa es una manera de ser que no conozco. Pues al igual que las prendas de vestir, en donde hay atuendos con lo que te sientes más cómodo y que usas más habitualmente según tus gustos y necesidades, las maneras de ser que más habitas tienen que ver con tu sistema de creencias, tus experiencias de niñez, tus momentos fuertes emocionalmente etc, y las que menos habitas, es porque dejaste en algún momento de creer que eran valiosas para ti y que te funcionaban para algo. Eso no significa que sean maneras de ser que no estén disponibles para ti. Es só AQ1|lo cuestión de práctica. ¿Cómo hacerlo? si me considero una persona insegura, ¿Cómo practico mi seguridad? bueno, te dejaré un par de ejercicios a realizar para que comiences a usar esas maneras de ser que tienes en el closet empolvándose, esperando a ser elegidas por ti para ayudarte a crear lo mágico, lo inimaginable. Mi alma honra tu alma. ¡Hasta pronto!


María Adelaida Gómez

Coach Ontológico

Coach Cuántico Espiritual

Escritora Libro "Asombrosamente"


EJERCICIOS PARA PRACTICAR MANERAS DE SER


1. Cuando quieras ser productivo y te sientas perezoso, por ejemplo, repite:


Yo soy productividad, yo soy disciplina. Dios siempre actúa a través de mí, por ende no hay forma de actuar incorrectamente.

La verdad de este problema es la sabiduría, la verdad de este problema es el amor, la verdad de este problema es la inteligencia.


Se trata de que pongas tu mente en el polo positivo de la manera de ser, con solo pensar y enfocarte en la palabra productividad, disciplina, diligencia, enfoque, ya estás llevando tu energía, tu intención, tu foco allí. Sólo requieres un poco de práctica. Inténtalo y me cuentas.


2. Las maneras de ser que menos habitamos, las dejamos atrás en algún punto de nuestra vida principalmente porque en la etapa de crecimiento alguna experiencia con nuestros cuidadores, nos hizo creer que esa manera de ser no era deseable, traía problemas y no era conveniente para ellos y en última instancia nos alejaba de recibir su amor, reconocimiento y aprobación. Sanar tu niño interior, te permitirá reconectarte con esas maneras de ser y su valor para crear la vida que deseas. A continuación te dejo una visualización que tiene como propósito esta sanación. Disfrútala.


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